Gran parte de nuestro tiempo lo pasamos en el trabajo, es casi como un segundo hogar, por lo que recuerda aplicar también aquí las medidas que empleas en casa y además... Y si se te ocurren otras, compártelas con nosotros aquí.
En las oficinas también se pueden separar los residuos en varios recipientes; organiza un programa de reciclaje. Recolecta las pilas convencionales y las baterías de los móviles para llevarlas a un punto limpio.
Reutilicemos materiales como los sobres de carta; con corrector o un pedazo de papel que tape el anterior destinatario queda como nuevo. Algunas empresas tienen sellos con varios renglones para nuevos usuarios, esa puede ser otra opción.
Lleva a tu oficina una taza y un vaso y no usarás plástico cada vez que bebas agua o tomes café. Usa los vasos plásticos solo para la visitas.
Las libretas, el papel de oficina y los documentos que pierden vigencia pueden reutilizarse como papel para tomar notas o para fotocopia. No arrugues el papel que ya has usado, pues así tiene mayor valor para el proceso de reciclaje.
Para evitar el desperdicio de luz eléctrica, ubiquemos los escritorios junto a las ventanas.
Y si lo haces, imprime lo menos posible. Si tienes que archivar o guardar documentos hazlo de forma digital, en una memoria externa o directamente en el disco duro. A la hora de imprimir hazlo por ambas caras del papel y en un tipo de letra pequeño para que quepa más texto.
Usa pantallas planas, consumen menos energía y emiten menos radiación. Apaga el monitor cuando no lo estés usando, pues gasta el 70% del consumo energético total del equipo. Para que el salvapantallas del ordenador ahorre energía ha de ser totalmente negro y es aconsejable configurarlo tras 10 minutos de inactividad como máximo.
Utiliza el correo en papel solamente en casos excepcionales.
Configura los equipos (ordenadores, fotocopiadoras, impresoras, faxes, etc.) en modo “ahorro de energía” si tienen esa opción, ya que se puede reducir el consumo eléctrico hasta un 50% y, al terminar la jornada, verificar que todas las máquinas, ordenadores y lámparas estén apagadas. Recuerda que las “luces piloto” también consumen electricidad.
Desplázate al trabajo en transporte público, en bicicleta, andando o compartiendo vehículo con tus compañeros.